Han pasado años, la técnica mejora y la ciencia también pero el ser humano (humanas principalmente) se ha vuelto muy imprudente/ imprudenta. Casi cualquiera puede pincharte botox o sustancia parecidas, lo hacen entre amigas, en la peluquería o una conocida que es muy apañada con todo. Jopé y les resulta tan barato que ojalá lo hubieran descubierto antes.
Ojalá –digo yo- hayas firmado antes una cláusula de responsabilidad porque tienes un alto porcentaje de error, un pinchazo en un nervio de la cara o..peor.
Las modas imponen la belleza exterior siguiendo cánones de famosas, pómulos altos, morritos salientes. Y ya está, de momento no se pide inteligencia y no se vende por internet.
Me pregunto si hubiera inteligencia disponible, quién la compraría. De veras resulta importante ser inteligente?, y dónde se pincharía la inteligencia? En la cabeza que hay sobre los hombros o en la entrepierna.
Cada cual que elija dónde tiene la inteligencia y qué cabeza usa.
Hace años se me ocurrió tatuarme el perfil de los labios y el tonto de mi novio les dedicó una canción en Cadena 100. Hace falta ser tonto, de los tontos tontadas.
Silvia
